-Django.
-¿Como se deletrea?
-D-J-A-N-G-O. La De es muda.
-Lo sé
Esta conversación aparentemente trivial entre Jamie Foxx y un famoso actor que interpreta un cameo con estas lineas y luego desaparece, tiene un significado simbólico.
Ese famoso actor no es otro que Franco Nero, el Django original, que con estas pequeñas frases, da la alternativa al nuevo.
Aquél cazarrecompensas que perseguía bandidos, sigue haciéndolo, pero ahora también ejerce de vengador de sus hermanos de raza, esclavizados por terratenientes malvados como Leonardo di Caprio y capataces traidores a los suyos como Samuel L. Jackson.
Acompañado por Christoph Waltz, el nazi sádico de Malditos Bastardos, convertido aquí en un duro pero entrañable aliado de nuestro heroe.
Reivindicación de un tipo del western violento de Sérgio Leone, con mucha hemoglobina marca Tarantino, con toques antiesclavistas. Una buena película de acción.
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