MONEYBALL: Empezaremos por esta película donde Brad Pitt y Jonah Hill trasladan a los hermanos investigadores de la serie Numbers al mundo del Beisbol. He de confesar que no soy muy aficionado al deporte, sin embargo, siempre me han gustado las matemáticas. Y precisamente son las matemática, y más concretamente, la estadística aplicada a buscar la alineación con mejor relación calidad precio. Basada en una historia real, no se puede decir que sea una mala película, en realidad es bastante buena, con un guionista como Aaron Soskhin y unas interpretaciones perfectas, con un Jonah Hill sobrio y contenido demostrando que puede hacer películas más serias que las que nos tiene acostumbrados. Pero, a pesar de todo, es una historia demasiado fria y alejada del cine con emociones. A mi me ha recordado cuando mi sobrino juega al FIFA en la Play y está más tiempo comprando jugadores y planteando alineaciones que jugando un partido.
EL ORIGEN DEL PLANETA DE LOS SIMIOS:Para empezar, decir que no se trata de la precuela del remake que realizó Tim Burton. Sino que es un remake de una de las secuelas del clásico que protagonizóo Chalton Heston. Concretamente la cuarta parte del mismo título, donde Roddy McDowall volvia a encarnar el papel de simio Cesar, hijo de Aulerio y la doctora Zira, después de que hubieran viajado al pasado y conocido al empresario de circo, interpretado por Ricardo Montalbán. En esta nueva versión, se prescinde de este extraño giro temporal para centrarse en un experimento científico en la lucha contra el alzheimer. Lo que comiena como una historia de amistad y buenos sentimientos, interesante pero rutinaria, va ganando según transcurre la acción hacia un espectacular climax en una media hora final llena de acción, lo que convierte a la cinta en un notable divertimento. A destacar como siempre el trabajo de John Lithgow, uno de esos secundarios de lujo que siempre salvan una película o serie por muy rutinaria que sea (recuerden la 4ª temporada de Dexter), y por supuesto el trabajo de Allan Selskin, primer actor de la era digital con papeles del tipo de Gollum, King-Kong o el capitan Haddock, que aquí llena de humanidad al simio Cesar.
LA PESCA DEL SALMÓN EN YEMEN: Un mcguffing no solo sirve para las películas de suspense. También pueden servir para una historia romántica. Este es el caso de esta película donde el mcguffing del título permite unir a Ethan Hawk y Gabrielle Anwar, perdón, quise decir a Ewan McGregor y Emily Blum, siempre los confundo, en unos paisajes exóticos donde lo que menos importa es el salmon. O si no, que se lo pregunten a Kistin Scott-Thomas como la descacharrante ministra que lo lia todo. Buena y bonita película que se ve sin sobresaltos y se disfruta igual.
COMO ACABAR CON TU JEFE: Comedia tontorrona, pero de pocas películas se puede decir que los secundarios son más conocidos que los protagonistas. Como si de una película de Torrente se tratara, pòr ahí andaban como pulpos en garaje Kevin Spacek, Colin Farrell, Donald Sutheland, Jamie Fox y Jennifer Anniston. Un reparto que hubiera sido todo un lujazo en una história más interesante que esta. ¡Lo que hace la crisis!
GRUPO 7: Por último este The Shield o The Wire a la andaluza me defraudó por varias razones. La manía de algunas películas españolas de hablar casi en susurros, ademas con un acento andaluz muy cerrado, hace perder mucho dialogo, lo que ya pasaba en la anterio película de su director 7 virgenes (manía con el número 7) además, está llena de elipsis y sobreentendidos que la hacen algo complicada de seguir. Si hubiera que destacar algo, sería el trabajo, sobrio y correcto como siempre del gran Antonio de la Torre, en contraposición de la chuleria prepotente de niñato de moda Mario Casas (que me perdonen sus fans que me estarán leyendo). Me quedo con No Habrá Paz para los Malvados como ejemplo de trhiller español.
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