Hace unos cuatro o cinco años que leí "Un Mundo Sin Fin". Sin llegar a gustarme tanto como su primera parte "Los Pilares de la Tierra", he de reconocer que disfruté de su lectura y seguí con interés las aventuras y amores de Merthin y Keyris, y más cuando tenía la oportunidad de irlas comentando con dos compañeras que lo estaban leyendo al mismo tiempo que yo.
Cuando una novela me gusta, llego a identificarme con los protagonistas, me meto con ellos en su historia, y a veces, me cuesta salir de la historia y volver a la realidad. Quiero saber que pasa y como va a acabar. Y cuando acaba, me quedo con ganas de que la historia hubiera seguido, aunque sea un libro de más de mil páginas. Me gustan las novelas largas.
También voy poniendo caras a los personajes, recuerdo que comenté con mis compañeras sobre que actores podrían interpretar a este o a aquel personaje en una hipotetica película. Esa película ha llegado, y ninguno de los actores imaginados participan en ella.
Al igual que en "Los pilares de la tierra" la realización es impecable, pero el problema es el mismo. Adaptar un libro tan basto implica cambios y eliminaciones de escenas que en el libro te parecían claves para su desarrollo. En matemáticas aprendí que no se pueden hacer operaciones con numeros heterogeneos, ¿Como dividir 1000 paginas entre 6 horas? Siempre se perderá algo por el camino.
De todas formas, siempre son bienvenidas, al menos por mi parte, este tipo de historias. Al igual que en el caso de "Juego de Tronos", son productos de gran calidad y que suelen gustar a la mayoría. Son muy recomendables y hasta adictivos.
Pero, por favor, les recomiendo que también lean los libros en que están basadas. Los van a disfrutar mucho más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario